Nuestro deseo como equipo de MSF para el 2017 contener la propagación de la enfermedad, pero sin medicamentos, pruebas o vacunas para tratar, diagnosticar y prevenir la enfermedad.
Nuestro personal se sintió impotente cuando estalló la crisis de Ébola en África Occidental en 2014.
Hicimos lo que pudimos para aliviar el sufrimiento de las personas y contener la propagación de la enfermedad, pero sin medicamentos, pruebas o vacunas para tratar, diagnosticar y prevenir la enfermedad, nos enfrentamos a una labor imposible. Por eso, este es nuestro quinto deseo para el 2017.