Desde el 7 de octubre, la violencia se ha desbordado en Cisjordania. En Yenín / Jenin , nuestro personal de medicina de urgencias ha tenido que acudir al hospital público casi todas las noches, mientras las incursiones israelíes con tanques y tropas terrestres asolan la ciudad.
En el último mes, las fuerzas israelíes han matado a 30 personas y han herido al menos a 162 más sólo en Jenin, según el Ministerio de Sanidad palestino.
“La mayoría de los pacientes que recibimos han recibido disparos en el abdomen y las piernas. A algunos les han destrozado el hígado y el bazo, mientras que otros presentan graves lesiones vasculares”, afirma el Dr. Pedro Serrano, médico mexicano de nuestra unidad de cuidados intensivos.
“Tuvimos un caso muy triste de un hombre que caminaba justo por la entrada del hospital cuando un francotirador le disparó en la cabeza. La violencia continúa y la mayoría de los pacientes que recibimos tienen lesiones potencialmente mortales”, explica.

Los paramédicos del campo de refugiados de Jenin tienen que utilizar un tuktuk -que donamos- para recorrer los estrechos callejones del campo y recoger a las personas heridas. Las fuerzas israelíes bloquean a menudo la entrada al campo, lo que hace casi imposible que las ambulancias entren y salgan con los heridos graves a tiempo para salvarles la vida.
El rastro de la destrucción puede verse también en la propia ciudad de Yenín, donde las infraestructuras y los edificios simbólicos palestinos han sido destrozados y destruidos por excavadoras y tanques.
Las incursiones y los incidentes violentos no son exclusivos de Jenin. En toda Cisjordania han muerto 165 palestinos desde el 7 de octubre y más de 2,400 han resultado heridos, según las autoridades palestinas.
Además, hasta 6,000 gazatíes que tenían trabajo en Israel antes de la guerra, pero cuyos permisos de trabajo han sido cancelados desde entonces, viven en centros para personas desplazadas repartidas por Cisjordania, según el Ministerio de Trabajo palestino.

Nuestros equipos visitan estos centros de personas desplazadas para donar suministros médicos, incluyendo medicamentos para enfermedades crónicas, y brindar apoyo en salud mental. Algunos pacientes han contado a nuestro personal que fueron golpeados, humillados y maltratados mientras permanecían detenidos por las fuerzas israelíes en las semanas transcurridas desde el 7 de octubre.
“Hemos tratado a algunos pacientes que mostraban signos de haber sido atados y golpeados, al parecer por fuerzas israelíes”, explica Yanis Anagnostou, responsable de actividades de salud mental de MSF en Jenin. “Denuncian haber sido atormentados durante varias horas antes de ser abandonados en la frontera de Cisjordania”.